Acolchado

El acolchado se utiliza para proteger el suelo en el que se encuentra la planta de cualquier efecto negativo que pueda generar el exceso de precipitaciones.

Para realizar esta técnica de cuidado y mantenimiento de jardines, lo único que hay que hacer es generar una capa sobre la tierra en la que está sembrada nuestra planta, para lo cual se utiliza material orgánico e inorgánico.

Lo que se suele utilizar para el acolchado es corteza de árboles, paja, composta, recortes de hierba, y gravilla, entre algunos otros materiales.

 Nutrir las plantas

Para que las plantas puedan desarrollarse en un suelo sano y libre de patógenos, se debe aportar productos que confieran al suelo los nutrientes. Una estructura con microorganismos aumenta la captación de nutrientes por la planta, obteniendo mayor porte y vigor.

Aportar materia orgánica

El aporte de materia orgánica al suelo es fundamental. Se favorece el crecimiento de las plantas en un suelo sano y libre de patógenos, capaz de que se instalen microorganismos y fauna beneficiosa. La mejor forma de hacerlo es aportar al suelo humus de lombriz, que además de aportar materia orgánica al suelo, mejora la estructura y aporta nutrientes a las plantas.

Eliminar hojas secas

Al eliminar las hojas secas del jardín y de las plantas obtendrás un aspecto más verde y cuidado. Además, cuando se quitan las hojas muertas se evitan que sea el refugio de plagas y el lugar donde se pueden instalar hongos oportunistas que puedan afectar a nuestro jardín.