Control de malezas
El desmalezado se realizó de manera manual, esta labor se hizo seis veces en
todo el ciclo del cultivo, la herramienta que se usó fueron las escardas. No se
usó herbicidas en el campo.
3.4.5. Riego
El método de riego aplicado fue por gravedad, que consistió en la conducción
de una corriente de agua desde una fuente abastecedora hacia nuestro campo,
aplicado directamente a la superficie del suelo cubriendo total o parcialmente
el suelo, la frecuencia con que se realizó el riego fue de dos veces a la semana.
El primer riego fue ligero, y luego se sembró (Anexo 1).
3.4.6. Control de plagas y enfermedades
El manejo y control de plagas enfermedades se realizó con aplicaciones de
fungicidas e insecticidas de acuerdo a las evaluaciones constantes al final del
día. Se usó como herramienta, una mochila aplicadora
La judía pertenece a la familia de las leguminosas. De cara al cultivo, existen dos tipos: las judías tiernas de mata baja, con tallos erectos que no necesitan de tutorado; y las de mata alta o enrame, que sí que requieren un tutorado.
Clima: las judías no crecerán si las temperaturas son inferiores a 10ºC o se reduce el fotoperíodo (la cantidad de luz recibida en un día). Se desarrollan mejor en climas cálidos y templados. Si las plantamos en zonas ventosas las protegeremos, pues son plantas frágiles y no soportan la incidencia directa de vientos fuertes.
Sustrato: No se desarrollan bien en tierras frías y húmedas, pero tampoco si están muy secos. Les favorecen suelos mullidos, bien cavados, frescos y ricos en humus, pero sin restos de materia orgánica fresca. A la hora de elegir la parcela, buscaremos que estén expuestas al sol, para que el suelo pueda calentarse.
Nutrientes: las judías no requieren abonado, pues, al igual que el resto de leguminosas, son capaces de fijar el nitrógeno atmosférico gracias a las bacterias nitrificantes que poseen en sus raíces. Si el suelo es muy pobre, sería interesante esparcir un mes antes de la siembra abono orgánico muy descompuesto (mantillo), mezclándolo con la tierra.
Riego: las judías precisan de suelos que no se resequen, pues soportan mal la carencia de humedad. Preferiblemente no regaremos abundantemente en la época de la primera floración, pues podría provocar la caída de las flores.
FACEBOOK:
VendePlantasOnline
INSTAGRAM:
vendeplantas123
YOUTUBE:
@vendeplantas123
TIKTOK:
@vende_plantas
CORREO:
ventas@vendeplantas.com
WHATSAPP:
(+51) 982 011 485
(+51) 902 641 016