SIEMBRA
La siembra puede ser al voleo a mano o mantillo, usando sembradora manual para alfalfa, sin descartar equipo mecánico y de precisión. Considera que se pueden lograr buenos establecimientos utilizando 2 a 25 kilos de semilla pura viable. Depende de la calidad de los preparativos agronómicos y control de siembra. Lo normal es tirar 5-6 kilos. La semilla se tira encima del suelo y se puede cubrir tirando al voleo una capa de composta. La profundidad de siembra es 1/8 a 1/4 de pulgada o el grosor de una hoja de triplay. Es decir enterrada no más de 8 veces el tamaño del grano. Se puede lograr con un paso de cultipacker. En sí, la semilla debe estar cubierta de suelo en todo su alrededor, para que haga contacto con la humedad y se embebezca para su germinación. No le debe dar el sol directo o tener semilla descubierta. De ser necesario tapar la semilla descubierta, volviendo a tirar abono asperjado para cubrirla del sol.
NACENCIA Y RIEGOS
Considerando la incorporación de fertilizantes orgánicos (composta, humus, estiércol, gallinaza, bocachis, lixiviado (jugo) de lombriz, ácidos carboxílico), fósforo, nitrógeno, herbicidas preemergentes para hoja ancha con 20 días antes de sembrar o postemergentes con 20 días de nacido cuando la maleza tenga menos de 4 hojas. Planear una buena preparación del terreno para la cama de siembra considerando que es un cultivo perenne, acordes al manual de prácticas agronómicas de un centro de investigación. Ver recomendaciones técnicas del campo experimental INIFAP para cereales (trigo) más cercano, es un buen camino a seguir.
Se pueden conformar surcos, curvas a nivel en contorno y bordo, que incrementen la superficie del suelo, así como apoyo para el control del riego y cerrar terrones con un paso de cultipacker o roladora. Se tira la semilla de siembra y se compacta de nuevo con cultipacker o paso de ramas, que tapen, no que barran la semilla.
El primer riego debe humedecer los 10 cm de profundidad del suelo. Aplicar 3 cm al riego de nacencia cada 4 días, de preferencia durante la madrugada para que las hojas tiernas que van germinando se sequen durante el día y no hay incidencia de hongos. De ser necesario por suelos arenosos y días soleados, regar 2-3 veces al día. El sistema de riego cañón, goteo, aspersión, gravedad o rodado dictarán si es práctico. Al nacer la planta germinada necesita riego cada semana. El principio es formar un suelo húmedo, no mojado o encharcado. La germinación se viene escalonada a los 7-15-20-30 días, por ello no debe faltar humedad superficial, para que emerja uniforme y no queden semillas sin nacer.
En un cultivo establecido, después del corte el riego se aplica para incorporar fertilizantes, al menos cada 15 días. No pastorear en suelo húmedo. Hay que esperar 20 días después del riego para introducir animales y no compactar el suelo.
En suelos bien regados y con buen manejo de la pradera de bermuda se pueden utilizar hasta 400 unidades de nitrógeno por hectárea por temporada para incrementar los rendimientos. Se recomienda aplicar 100 unidades de Nitrógeno despuÉs de cada corte o pastoreo, de preferencia utilizar Sulfato de Amonio [(NH4)2SO4] (20.5 N – 24.2 S); después de la fertilización aplicar el riego lo más pronto posible, para evitar perdidas del fertilizante por exposición al sol. Puede hacer un análisis de suelo para conocer con más precisión las necesidades de fertilizante de su terreno.
El bermuda gigante tolera el pastoreo intensivo pero debe ser protegido en invierno. Sin embargo un pastoreo intensivo fomenta la competencia con malezas e impide el uso eficiente de los nutrientes y humedad por las plantas de bermuda
En terrenos donde la siembra previa fue ryegrass es probable que tengan problemas de germinación y de establecimiento, En recientes estudios se ha encontrado que el ryegrass produce un inhibidor natural que provoca problemas de germinación en los cultivos subsecuentes. Si es así que existieran siembras de ryegrass previas es necesario quitar o remover todos los residuos de este en la medida que sea posible. Se puede hacer asperjando el ryegrass con ácido sulfúrico o con cantidades importantes de fertilizante nitrogenado e incorpore los residuos lo mejor posible, después de realizar estos trabajos los preparativos para la siembra son los normales.
Esto es necesario solamente cuando se va establecer el bermuda por primera vez después del ryegrass. En los años subsecuentes, desde que se establece el bermuda y se desarrolla por rizomas y estolones más que por semilla se puede sembrar ryegrass.