Malpighia emarginata, llamada comúnmente acerola, cerecita, manzanita o semeruco,nombre que recibe su fruto, es una especie de la familia Malpighiaceae que crece espontáneamente en América Central, las Antillas y en las zonas tropicales húmedas de Sudamérica. Es apreciado por sus frutos, que tienen un alto contenido de vitamina C, y su uso ornamental.​ No confundir con la especie Crataegus azarolus, conocida comúnmente como acerolo. 

La acerola es uno de esos arbolitos ideales para decorar los frentes de las casas, aceras, jardines, parques, etc., gracias a su bajo tamaño y constante floración. Naturalmente, se encuentra desde México hasta Sur América y el Caribe, aunque se le ha plantado en muchos otros países para la comercialización de sus frutos, siendo Brasil el productor, consumidor y exportador número uno en el Mundo.

Es un arbolito de rápido crecimiento cuando logra adaptarse bien al sitio y se le puede plantar, más o menos, hasta los 1400 m de elevación. Le gustan los sitios con condiciones secas y no es exigente en cuanto a suelos, aunque prefiere los de buena calidad.

Por lo general no sobrepasa los 3 a 6 m de altura y posee un sistema radical, poco profundo y no dañino, lo que favorece su uso en aceras y lugares cercanos a infraestructuras, porque no generará daños en tuberías ni superficies; pero se debe tener cuidado de no plantarla en lugares expuestos a mucho viento porque no logrará un buen soporte y podría arrancarse. Presenta uno o varios troncos torcidos con una corteza oscura y ramas quebradizas que salen desde muy abajo, enmarañándose entre ellas mismas; su densa copa es amplia y cubre casi todo el tronco desde abajo.

Por fruto se pueden presentar 2 o 3 semillas, que si logran germinar darán arbolitos que en unos 3 años estarán con cosecha, también se puede reproducir por medio de estacas, acodos o esquejes y los frutos se obtendrán en menor tiempo.

Es de rápido crecimiento que resiste la sequía y le gusta el pleno sol, pero también puede desarrollarse a media sombra, aunque la floración será deficiente, al igual que ante la falta de agua.