Echeveria cuspidata Zaragoza 

Durante el invierno y si está en suelos secos, la echeveria Zaragoza posee la peculiaridad de que su color adoptará tonalidades rosas, oscuras y grisáceas. Es muy apreciada como planta ornamental por la bonita forma de roseta de estas. Se trata de una suculenta de fácil mantenimiento y reproducción que posee una gran capacidad para almacenar agua. 

Echeveria cuspidata parrasensis 

Hojas en una roseta densa, a veces cien o más, muy glaucas en ambos lados, algo teñidas de rojo, de contorno oboval, de unos 6 cm de largo, a menudo de 3,5 cm de ancho en el punto más ancho, cuspidadas.

Tallo floral de 20 – 40 cm de largo, glabro y pálido, a veces de color rosado, que lleva en toda su longitud dispersas pequeñas hojas ovadas, libres en la base y agudas en cada extremo.

Inflorescencia en racimo simple, secunda, al principio fuertemente inclinada, de unas 15 flores, yemas dispuestas en dos filas, obtusas, pedicelos inferiores alargados, de 10 mm de largo o menos.

Flores : Sépalos desiguales, todos mucho más cortos que la corola, ovados, agudos, corola de 1 cm de largo, violáceas con ápices agudos amarillentos poco extendidos, los lóbulos unidos en cerca de un cuarto de su longitud, 10 estambres , todos insertos en el tubo de la corola, los 5 opuestos a los sépalos insertados en la parte superior del tubo, los otros 5 insertados un poco más abajo en el tubo, carpelos erectos, libres hasta la base.